Escucha Activa: La diferencia entre oír y prestar atención

Bueno, por sí no lo sabés, te cuento una cosa, no es lo mismo oír que escuchar. Pero, además de eso, una cosa es simplemente escuchar, y otra cosa es realizar una escucha activa. Esta última es una gran manera para comprender tu entorno.

Pues, la escucha activa te ayuda con la comprensión del mercado, las relaciones, tu relación con el público, y en consecuencia, con las ventas. Pero, en especial, la escucha activa te ayudará a comunicarte correctamente con los clientes y colaboradores.

Es qué, un proceso de comunicación simple va mucho más allá de simplemente comunicarse, hace falta entender y empatizar con la contraparte.

Comprender dicho proceso, te ayudará con una gran cantidad de situaciones, no solo laborales, sino que también con las personales. Pues, una comunicación efectiva, es crucial para entablar cualquier relación.

¿Qué es la escucha activa?

Entonces, podemos decir que la escucha activa es una técnica que ayuda a establecer una comunicación eficiente. En ella, el oyente puede asimilar e interpretar el contenido, y el hablante puede expresarse correctamente, gracias al feedback recibido.

En esta técnica, el enfoque principal no está en el contenido propiamente dicho, sino que está centrado en la persona.

Pues, los procesos de comunicación, no deben exclusivamente absorber la información expresada por el interlocutor. Ya que, en algunas oportunidades el exceso, o la falta de contenido, generan problemas de concentración o comprensión del mensaje.

Con la escucha activa se intenta romper este ciclo de pocas interpretaciones, mediante el desarrollo de habilidades de comunicación que garanticen un diálogo eficiente. Esto, además se puede aplicar a la vida personal y profesional.

Para romper este ciclo de pocas interpretaciones, necesitamos desarrollar un interés genuino en lo que dice el interlocutor. Eso nos permitirá entablar una conversación y evitar distracciones que impiden la absorción de información y de contenido relevante durante todo el proceso.

Por eso es interesante adoptar la escucha activa en un ambiente laboral. Pues, este proceso de comunicación, ayuda con el cliente interno y externo, el cual se potencia con reuniones y feedbacks, con comunicación clara y efectiva.

7 Beneficios de la escucha activa

Está claro que la escucha activa trae consigo una serie beneficios para tu vida, tanto para la personal, cómo para la laboral. Entonces, cuando pensamos en aplicar esta técnica, debemos considerar las ventajas de esta metodología.

1. La escucha activa mejora tus relaciones interpersonales

Un claro beneficio de la escucha activa, es que mejora tus relaciones interpersonales. Pues, gracias a la comunicación clara y la empatía, podrás comunicarte efectivamente con casi cualquier persona.

Pero, además, en el ámbito laboral, podrás mejorar la relación con tu equipo de trabajo, con tus clientes internos, y además, con tus consumidores.

2. La escucha activa genera confianza

También, una comunicación efectiva y eficiente, ayuda con la generación de confianza.

El intercambio de información y el interés genuino de ambas partes, optimizan la relación, tanto comercial, cómo personal. Pues, estas, demuestran que el oyente, se preocupa por prestar atención, hacer preguntas pertinentes, y además, ser consultivo durante el proceso de comunicación.

Pero, lo más importante para nosotros cómo emprendedores, es que la confianza genera ventas de productos y servicios.

3. Te permite desarrollar empatía

La empatía te permite desarrollar un interés real por la otra persona, entonces, trabajarla en la escucha activa es una buena idea. Pues, el desarrollo de pensamiento empático «ponerse en el lugar de la otra persona», produce una comunicación e interpretación eficiente.

La escucha activa se potencia también, cuando se da en ambas direcciones. Es decir, cuando nosotros escuchamos, y cuando nos escuchan.

Esto ayuda con los problemas personales que interfieren en una comunicación fluida. Pues, al ponerse en los zapatos de la contraparte, es sin duda una de las mejores formas de practicar tus capacidades empáticas.

4. Con esta técnica podés reducir los conflictos organizacionales

El igual que sucede con los puntos anteriores, esta técnica, te ayuda a minimizar los conflictos organizacionales. En especial, con los relacionados con la comunicación, pues, en las organizaciones, se dan constantemente.

Después de todo, cuanto más atención prestás a lo que tienen para decirte, un discurso, más información absorberás y menos malentendidos sucederán a diario.

5. La escucha activa mejora el trabajo en equipo

Además de minimizar los conflictos organizacionales, la escucha activa fomenta el trabajo de equipo.

La coordinación de grupos de trabajo requieren de una correcta comunicación, y una escucha activa a las partes involucradas. El hacerlo, mejorará las relaciones laborales, permitiendo hacer el trabajo, sin estrés, ni desacuerdos extra.

6. Podés mejorar la sensación de seguridad

La sensación de seguridad mejora durante este proceso de escucha activa.

Pues, al mejorar la absorción de la información y contenidos de interés, es posible tener mucha más seguridad en las acciones del trabajo. En especial, cuando se trata de optimizar los resultados y aumentar el rendimiento competitivo de la organización.

7. La escucha activa te ayuda a mejorar el flujo de información

El flujo de información se favorece con una escucha activa, en especial cuando de datos y hechos se trata. Pero, desafortunadamente, esto no ocurre en muchas empresas, me ha pasado en mi anterior trabajo. Mi superior directo, no tenía buena comunicación en general, pero en especial, no sabía de escucha activa.

Pues, cuando se practica la escucha activa, se intenta absorber la mayor cantidad de información posible, para tener un mejor desarrollo laboral.

De aquí la importancia del flujo de información en la comunicación interna. Pues, estos procesos se retroalimentan, así también como los procesos de venta para con el cliente externo.

Un buen profesional podría usar estratégicamente esta técnica, y en especial, quién tiene personal a cargo.

Cómo lo comenté, mi anterior jefa, carecía de esta cualidad. Entonces, la información se resentía, y eventualmente, alguien termina pagando los platos rotos. La información es una gran herramienta, dejemos que fluya.

10 Puntos clave en la escucha activa

Para disfrutar de todos los beneficios de la escucha activa, debes tener en cuenta algunos elementos.

Acá, te preparé 10 puntos clave para que puedas implementar la escucha activa de manera correcta. Esto facilitará que los beneficios de la misma, se puedan conseguir con mayor facilidad.

1. Evitá las distracciones al momento de ejecutar la escucha activa

El primer punto clave para practicar la escucha activa es anular la mayor cantidad de distracciones posibles. Despeja de tu mente, todas esas acciones que te impidan concentrarte en una conversación.

En los tiempos que corren, hay algo que obstruye nuestras conversaciones, y son los dispositivos móviles. Estos se encuentran constantemente mandándonos avisos de las diversas aplicaciones. Una idea interesante es apagarlos por un rato, y así concentrarnos en el interlocutor, dándole confianza y seguridad.

2. Escuchá todo lo que la otra parte tiene para decir

Durante la escucha activa, no tenés que interrumpir a la otra parte. Hay que escuchar, prestando atención, para ver todo lo que tenga para decir. Pero, es necesario prestar atención a todo, no solo a lo que nos interesa.

Hay que tener en mente que tenemos que absorber toda la información.

3. Que el tiempo no sea una limitación

El tiempo es el recurso más valioso que tenemos en la vida. Pero, sí pensamos que nos falta tiempo en el día, cuando se trata de trabajo, el tiempo se torna completamente efímero. Pues, en el ámbito laboral se agota mucho más rápido, y nunca se cuenta con la cantidad necesaria.

Pero, pese a estas limitaciones temporales, es importante tratar de asignar un espacio de tiempo indefinido cuando se pueda. Pues, las limitaciones, suelen apurar los mensajes, y hay información que nunca sale a la luz.

Tratemos de que el interlocutor no se guarde cosas.

4. La escucha activa no permite perspectivas personales

Esto se trata de ser lo más objetivo posible dentro de nuestra subjetividad personal.

Sí, es difícil lidiar con perspectivas y opiniones que son muy diferentes a las nuestras. Pero, tenemos que corrernos de ese lugar, y tener la capacidad de no permitir que nuestros puntos de vista personales no influyan.

Por lo tanto, ten mucho cuidado de no juzgar al otro según tus creencias. Comprende que cada persona ha tenido un proceso para llegar aquí, por lo que son diferentes.

5. Escuchá y observá el lenguaje no verbal

Claro que en la escucha activa la comunicación oral es lo primordial, pero no por eso debemos descuidar el lenguaje no verbal. Pues, el cuerpo y los gestos de tu interlocutor, pueden darte una pista de como se encuentra emocionalmente.

Es importante tener cuidado de evaluar cómo se comporta su cuerpo durante el diálogo y cómo reacciona a lo que se dice.

Tenés que observar las manos, las expresiones faciales y si el cuerpo está tenso o relajado durante el diálogo, por ejemplo. Esto en el caso de comunicaciones presenciales, naturalmente.

6. La comodidad de las partes es crucial en la escucha activa

Para garantizar una comunicación efectiva es clave garantizarle al interlocutor que se sienta cómodo durante la conversación. Pues, de esta forma se quitará peso de encima, y conversará más abierta y fluidamente.

Para contribuir en este proceso tenés que mostrar interés en lo que dice. También es importante el contacto visual para demostrar que realmente le estás prestando atención.

7. Hacé preguntas pertinentes

En la escucha activa, no solo tenemos que escuchar como sí fuéramos una pared. Podemos hablar, opinar, y por sobre todo, hacer preguntas pertinentes que faciliten el flujo de información por parte del interlocutor.

Es que hacer preguntas durante el proceso de comunicación, permite asegurarse que el mensaje sea entregado y asimilado correctamente por parte del oyente. Es interesante hacer preguntas durante el diálogo para recopilar aún más información, estimulando una conversación cada vez más profunda.

8. Utilizá el lenguaje corporal para generar confianza

El lenguaje corporal también es muy interesante para generar confianza. Hemos hablado sobre observar el lenguaje del interlocutor.

Sin embargo, como oyente, también puedes usar esta función para mostrar tu interés en el diálogo. Postura, tono de voz, expresiones y gestos pueden ser considerados.

9. La empatía es lo primero

La empatía es fundamental en el proceso de escucha activa. Entonces, mientras hablas con alguien, ponete en el lugar del otro y trata de entender qué siente. Pensá en sus motivaciones, valores, necesidades y expectativas lo llevó a pensar y hacer las cosas como las hace.

Pensá que cada persona tiene un background diferente, por eso debemos tratar de ver las cosas desde esta otra perspectiva.

10. Hacé Feedback sí corresponde

Como último punto, tenemos que brindarle feedback a la otra persona, sí es que corresponde. A veces, en situaciones cotidianas no es necesario hacerlo, no vas a darle feedback al verdulero, pero si se puede en ámbitos laborales.

Brindar un feedback al interlocutor luego de una charla, ayuda a mostrar como se ha interpretado la información. Brindar opiniones, demostrar la información que absorbiste, o incluso hacer cumplidos o críticas ayudan en el proceso.

Conclusión

Bueno, el post ha llegado a su fin. Recordemos un par de cosas:

Lo importante, durante el proceso de escucha activa, es poder desarrollar un interés genuino en lo que dice la contraparte. Pues, de esta manera, podremos ofrecer nuestra atención y tiempo a ese interlocutor, sin interrupciones ni distracciones.

Entonces, la escucha activa, puede ayudar no solo a mejorar las relaciones internas dentro de la empresa, sino también a nivel personal. Aplicá estos consejos con tus círculos cercanos, y te verás como potenciarás tus relaciones.

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FAQs sobre la escucha activa